El uso del conjuntivo en portugués no se distingue, a pesar de que hay diferencias, del uso del subjuntivo español. (En el brasil se prefiere llamarlo subjuntivo, como en español.)
Se usa el conjuntivo para describir acontecimientos, procesos, acciones que alguien se imagina, que pueden ocurrir, pero que todavía no ocurrieron, para describir acciones que alguién espera, teme, quiere etc. que ocurrán, pero no ocurrieron todavía o para describir acciones del pasado de los cuales no se sabe en el momento de imaginarselos si ya ocurrieron. (Yo esperaba que lo hubiese hecho.)
Sin embargo el mero hecho que una acción no se haya realizado todavía o el mero hecho que no se sabe si haya sido realizada por sí solo no exige el conjuntivo. Hay cantidad de verbos que decriben hechos como meramente imaginados que no requieren el conjuntivo / subjuntivo. ("Yo pensé que él iba a venir" y no "Yo pensé que él viniese".) El conjuntivo solo se impone cuando hay una evaluación subjetiva en cuanto a los hechos imaginados se refiere, aunque no está siempre muy claro lo que se entiende por evaluación subjetiva. El modelo ejemplar para el uso del subjuntivo en cualquier libro de texto sobre gramática española es el verbo esperar. Sin embargo en francés es más usual utilizar el indicativo.
indicativo en francés: J'espère qu'il vient.
subjuntivo en español: Espero que venga.
Otro ejemplo raro es creer en español. Está muy claro que él que cree algo, no está seguro. Sin embargo dudar exige el subjuntivo, pero creer no.
Dudo que lo sepa.
Creo que lo sabe.
Las reglas que rigen el subjuntivo no están por lo tanto muy claras, pero en general un hispanoblante puede confiarse en su intuición. Si un verbo rige el subjuntivo en español, también rige el conjuntivo en portugués.
Otro aspecto que requiere el conjuntivo / subjuntivo es la inseguridad y en cuanto a este aspecto se refiere hay una gran diferencia entre el español y el portugués. Miremos estas dos frases.
1) Cuando llegue, le pregunto.
2) Te lo digo, para que lo hagas.
Tenemos dos conjunciones, cuando y para que y ambos rigen el subjuntivo, aunque de hecho tienen nada en común. En 1) hay una inseguridad en cuanto al momento en la que la acción ocurrirá se refiere. Es la inseguridad que rige el subjuntivo. En la segunda es el hecho que alguién quiere que otro haga algo lo que rige el subjuntivo y esto no tiene nada que ver con inseguridad. El español, como todas las otras lenguas románicas, utiliza el conjuntivo / subjuntivo en dos contextos completamente distintos. El portugués utiliza el futuro de conjuntivo en el caso de que exista inseguridad en cuanto al momento se refiere en que la acción descrita por el verbo ocurrirá, vea 12.2.5, y el presente do conjuntivo cuando estamos delante de una evaluación subjetiva de los hechos imaginados, vea 12.2.1. Vamos a hablar de esto otra vez más en detalle más tarde. Un hispanoblante en general puede confiar en su "intuición" y utilizar el conjuntivo cuando utiliza el subjuntivo en español. Pero cuando solo hay inseguridad en cuanto se refiere al momento en el cual una acción imaginada ocurrirá, tiene que prestar atención.
Tanto en el caso de que un verbo rige el indicativo como en el caso que rige el subjuntivo / conjuntivo hay que respectar la concordancia de los tiempos. La concordancia de los tiempos es relevante en contextos distintos.
En el caso de que haya una frase subordinada. En este caso tiene que estar claro si la acción de la frase subordinada ocurre, ha ocurrido o ocurrirá al mismo tiempo, antes o después de la acción descrita en la oración principal y la acción principal puede haber ocurrido en el presente, en el pasado o en el futuro. En los ejemplos que siguen tenemos solo presente, indefinido y futuro en la oración principal. De hecho hay más tiempos del presente (el pretérito compuesto por ejemplo también es un tiempo del presente) y del pasado, pero los detalles los dejamos al lado de momento.
Volveremos sobre el tema en el capítulo 14, pero para comprender porque hay tantos tiempos en conjuntivo / subjuntivo tenemos que hablar brevemente sobre la concordancia de los tiempos.
La acción de la frase principal está en presente y la acción de la frase subordinada
ha ocurrido antes de la acción descrita en la oración principal
No podemos ir de vacaciones, porque el coche se ha estropeado
ocurre al mismo tiempo que la acción descrita en la frase principal
No podemos ir de vacaciones, porque el coche se estropea
orurrirá después de la acción descrita en la frase principal
No podemos ir de vacaciones, porque el coche se estropeará.
La acción de la frase principal está en el pasado y la acción de la frase subordinada
había ocurrido antes de la acción descrita en la oración principal
No pudimos ir de vacaciones, porque el coche se había estropeado
iba a ocurrir o ocurre después de la acción descrita en la oración principal
No pudimos ir de vacaciones, porque el coche se habría estropeado.
La lógica es básicamente la misma si la conjunción que introduce la oración subordinada rige el subjuntivo en la frase subordinada. Siempre hay que aclarar si las acciones descritas en la frase subordinada ocurren, han ocurrido o ocurrirán al mismo tiempo, antes o después de la acción descrita en la oración principal y la acción de la frase principal es el ancla, o sea las acciones de la frase principal pueden haber ocurrido en el pasado, en el presente o en futuro.
Lo hago para que no me moleste más.
Lo hago cuando me haya pagado.
Lo hice para que no me molestara más.
La concordancia de los tiempos hay que respectarla también en el caso de que alguien se imagina una acción, un acontecimiento un proceso porque lo espera, teme, quiere etc. o porque lo cuenta a otro. Algunos de estos verbos como alegrar, doler, extrañar, importar, lamentar, molestar, sentir, sorprender, temer, gustar etc.. exigen el subjuntivo, otros como creer, decir, pensar, el indicativo, pero el problema es el mismo. Hay que respetar el orden cronológico, tratase de un acontecimiento meramente imaginado y irreal o de un acontecimiento real.
Se discute la concordancia de tiempos muy a menudo en relación con el discurso directo y efectivamente hay que adaptar los tiempos cuanto alguién cuenta lo que otro cuenta, contó o contará.
a1) El dice: Estoy contento. => b1) El dice que está contento.
a2) El dijo: Estoy contento. => b2) El dijo, que estaba contento.
a3) El dijo: Lo hice. => b3) El dijo que lo había hecho.
En el caso a1) tanto la acción de la oración principal como la acción de la oración subordinada están en el presente. En este caso no hacen falta modificaciones en los tiempos verbales. En a2) hay que adaptar los tiempos. El presente se convierte en un imperfecto. En a3) hay anterioridad y por lo tanto el indefinido se convierte en un pluscuamperfecto.
Sin embargo esto no es el punto. El punto es, que no hay diferencia alguna entre la concordancia de los tiempos en el contexto del discurso indirecto, o sea en relacíon con verbos como decir, contar, narrar, afirmar etc. y otros verbos como creer y pensar que también exigen el indicativo. La sistemática es la misma en ambos casos. Presentar la concordancia de los tiempos como un fenómeno específico del discurso indirecto es engañoso.
Igualmente tampoco hay diferencia en cuanto al discurso indirecto se refiere entre los verbos que exigen el indicativo y verbos que exigen el subjuntivo. En ambos casos hay que adaptar los tiempos según el contexto, si los acontecimientos de la oración subordinada ocurren, han ocurrido o ocurrirán después de los acontemientos descritos en la oración principal y estos acontecimientos pueden haber ocurrido en el presente o en el pasado. Los tiempos utilisados no son los mismos, al prestente de indicativo corresponde el presente de subjuntivo, al imperfecto de subjuntivo el imperfecto de indicativo, al pretérito compuesto de indicativo el pretérito compuesto de subjuntivo, pero la sistemática es la misma en ambos casos.
Yo esperé que haya llegado.
Yo creí que ha llegado.
Yo espero que venga.
Yo creo que viene.
Lo que debe entenderse, porque es un asunto relevante en muchos contextos, es la idea básica de la concordancia de los tiempos. No cabe ninguna duda que un nativo de español no tendrá problema alguno con el uso del conjuntivo portugués dado que las diferencias son mínimas, si dejamos al lado los problemcillos con el futuro do conjuntivo, vea 12.2.5, pero de vez en cuando un poco de teoría es útil, sobre todo cuando se trata de aprender una lengua que es un poquito más ajena a la respectiva lengua materna.
La tabla abajo muestra de forma esquemática el uso de los tiempos en el contexto de la concordancia de los tiempos en portugués. (Que no se distinge del español.) Por momento de la presentacion mental entendemos el momento en que alguien
cuenta, dice, narra, etc. una cosa, (discurso indirecto, indicativo),
espera, teme, quiere una cosa, (subjuntivo)
o piensa, cree o sabe una cosa, (indicativo).
La lógica siempre es la misma. Alrededor de este momento de la presentación mental hay que agrupar los acontecimientos y este momento puede situarse en el presente y en el pasado. Hay solo una constelación que se distingue del español, lo que se debe al hecho que el preterito perfeito composto do indicativo portugués se distingue del pretérito perfecto español.
indikativo
momento de la presentación mental está en el presente
momento de la presentación mental está en el pasado
al mismo tiempo
presente do indicativo
al mismo tiempo
imperfeito indicativo
antes
perfeito simples do indicativo
antes
mais-que-perfeito-composto indicativo
después
presente von ir + infinitivo
después
imperfeito von ir + infinitivo
conjuntivo
momento de la presentación mental está en el presente
momento de la presentación mental está en el pasado